10 de julio de 2010

No me hace falta

Es tu paz la que calla mis tormentos; eres tú la causa de mi calma

No me hace falta el vasto desierto
ni la claridad del cielo abierto.
No me hace falta una playa clara
o su quietud si no terminada.
No me hace falta un mar quieto y tibio
ni todo un manto pleno de cirios.
No me hace falta un largo trayecto
para llegar a un lugar incierto.

Me haces falta tú.
Me haces falta tú, amor.
Me haces falta tú.

No me hace falta un día caluroso
ni estar flotando cual pez curioso.
No me hace falta un hallazgo enorme
o escalar las rocas cuneiformes.
No me hacen falta canciones bellas
o noches dulces con mil estrellas.

Me haces falta tú.
Me haces falta tú, amor.
Me haces falta tú.

No me hace falta un alba rojiza
o gente extraña con su sonrisa.
No me hacen falta ruinas antiguas
como tampoco frases ambiguas.
No me hace falta un breve descanso
o callar poco en un remanso.

Me haces falta tú.
Me haces falta tú, amor.
Me haces falta tú.

No me hace falta la sola idea
de volver pronto, de ser poeta.
No me hace falta dormir absorto
o creer siempre que el tiempo es corto.
No me hacen falta méritos falsos
o ir por la costa con pies descalzos.

Me haces falta tú.
Me haces falta tú, amor.
Me haces falta tú.

A ti, nota perfecta para cada melodía existente.